domingo, 31 de diciembre de 2017

¡ESTOY ENTUSIASMADO!

Los que lucimos canas hemos tenido la gran suerte de disfrutar de una etapa apasionante de la Historia que ya hubieran deseado muchos para sí, y al mismo tiempo podemos disfrutar de una perspectiva histórica, pero muy cercana, de la evolución de los acontecimientos, lo que nos permite ver simultáneamente los árboles y el bosque.

Probablemente seamos la única generación en la Historia de la Humanidad que no ha vivido una guerra en su propio territorio. Este prolongado periodo de paz ha proporcionado la tranquilidad y estabilidad necesarias para disfrutar de un periodo de progreso sin antecedentes, en favor de la sociedad. Paralelamente, la acumulación de acontecimientos de relevancia y trascendencia ha sido ininterrumpida, y han acontecido a un ritmo tan vertiginoso que ni siquiera nos ha dado tiempo de darnos cuenta de ellos. En un lapso de tiempo muy corto, consideremos por ejemplo los últimos 50 años, apenas un suspiro desde que tenemos registros que podamos considerar históricos, hemos pasado del arado romano tirado por bueyes al empleo de sorprendente maquinaria especializada, y no sólo en la agricultura, sino en todas las industrias. Autómatas programables y robots se están generalizando en todos los hogares. Despedimos a las palomas mensajeras para acabar sustituyéndolas por el WhatsApp. Hemos sido testigos de la conquista de la Luna, de grandes logros en la lucha por los derechos civiles, de tremendos avances en medios de transporte, y popularización de los viajes de placer en avanzados aviones, trenes y cruceros. Ya hemos dado algunos pasos en la comercialización de paquetes turísticos espaciales. Cualquier información, educación y formación personalizada e instantánea está a nuestra disposición a la ínfima distancia de un click. Disfrutamos de hogares con todas las comodidades, tremendos e incomprensibles avances en nutrición, ocio, deporte, sanidad e investigación en todos los campos del saber, que los más jóvenes no pueden apreciar (muchos avances tecnológicos, considerados revolucionarios en un pasado muy reciente, pasan desapercibidos e ignorados por las nuevas generaciones).

Ninguna civilización anterior había asistido a una transformación tan trepidante.

¡Y lo que está por venir!

Muchas cosas que hace poco catalogábamos como de ciencia ficción no son ahora más que realidad histórica.

Hoy en día el conocimiento y las oportunidades profesionales están a disposición de cualquiera en internet.

¡Ya no hay excusas!

Año tras año, el comercio electrónico continúa robando protagonismo al comercio físico tradicional. Una mínima formación básica como usuario en ciencia y tecnología se está haciendo cada vez más imprescindible para poder optar a una salida profesional digna en el futuro inmediato. Lo repiten una y otra vez todos los medios de comunicación. Cada año se hace más evidente, a pesar de ello muchos siguen enrocados en un mundo del pasado que puede acabar condenándolos a un futuro de dificultades.

Como mi viejo conocido Tjure: ¡Estoy entusiasmado! por disfrutar en primera fila de la que se avecina.


¡Qué emoción!

Afrontamos con mentalidad abierta y sin miedos un nuevo año que seguro que no estará exento de dificultades y de retos por resolver. El progreso, que sólo nuestra especie es capaz de entender, está basado en el cuestionamiento y transformación de paradigmas obsoletos, en el inconformismo por las incomodidades y la voluntad por alcanzar una vida mejor. Yo me apunto. ¿Y tú?