Lo que realmente importa no es el acierto o el error, sino el proceso de aprendizaje.
Evitar las quejas y las excusas, concentrándose en la búsqueda de soluciones.
Nos salvamos porque no sabíamos que era imposible hacerlo.
Si morimos, moriremos caminando.
Si morimos, moriremos caminando.
Y después de todo lo que habían pasado, cuando le preguntaron: