Voy a estudiar tal cosa porque hay trabajo. HASTA QUE DEJA DE HABERLO.
Durante décadas nos han contado la película de:
Que hay que tener un título: todo el que lo ha querido tiene ya alguno, o varios. Somos coleccionistas de títulos, como si por arte de magia se fueran a convertir en dinero.
Que hay que encontrar un buen trabajo: que me digan dónde está, o mejor dicho, si existe.
Que tenemos muchos derechos (entre otros a protección social)...
En definitiva, nos han educado en la dependencia y la mendicidad. Y ahora, que los que nos tienen que solicitar esos títulos, u ofrecer esos trabajos, o garantizarnos esos derechos... ni están ni se les espera, o no son capaces de cumplir con sus responsabilidades, qué hacemos.
Cada vez es más difícil encontrar un "empleo de calidad". Vamos, que ni con lupa.
¡Cuidado, cuanta más formación, mejor! No me malinterpretes. Pero fórmate en lo que a ti te interese Y/O redunde en tu bienestar, no en el de otros, que lo único que persiguen es el suyo. ¡Sé práctico! ¡No confundas vocación con financiación! Si lo que a ti te gusta, o sabes hacer muy bien, no está valorado, ya te puedes ir buscando las habichuelas de otra manera, o averiguando la forma de ponerlo en valor, porque si no, lo vas a pasar mal.
Lo que nos han vendido durante décadas YA NO VALE. Aprende a no esperar nada de nadie, a buscarte tus propias soluciones, a innovar, a hacer cosas diferentes, a esforzarte, a actuar en lugar de esperar.
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